martes, 21 de mayo de 2024

2067, una peli tan mala que... No, es mala y punto

Hace un tiempo vi esta película y me pareció tan horrible que tenía que hablar de ella en algún momento. Quise haber hecho esta entrada al día siguiente de verla, para no olvidarme de nada, pero la dejé a medio escribir por falta de tiempo y después... digamos que la vida me ha atropellado a base de bien. Cuidado, que no me voy a cortar con los spoilers.

Antes de continuar y por si acaso no has llegado a este blog a través de mis redes sociales y, por tanto, no me conoces, quiero aclarar una cosa: las personas podemos y debemos tener opiniones diferentes. Que a mí no me haya gustado esta película o cualquier otra cosa no me hace mejor ni peor persona ni mi gusto es mejor ni peor que el tuyo. No insultes a nadie con criterios diferentes, no des lecciones ni expliques por qué deberían cambiar su opinión. Esto solo aplica si la persona en cuestión... es nazi, terraplanista o antivacunas.

Pues bien, una noche estaba sola en casa y me puse a buscar una peli para ver en Amazon. Quería algo que no hubiera visto antes y me llamó la atención este título cuya sinopsis tenía muy buena pinta.

Cartel de la película. En tonos verdes oscuros principalmente, están los dos personajes protagonistas de frente, cada uno con una máscara transparente que les cubre toda la cara. Al fondo, se ve la silueta en pequeño de un personaje ante una ciudad destruía cubierta por vegetación.

En el futuro cercano, el cambio climático ha provocado la necesidad de emplear oxígeno artificial para poder respirar. Con su mujer enferma y pocas esperanzas de sobrevivir, Ethan (Smit-McPhee) se ve obligado a viajar al futuro para buscar una cura para su misteriosa enfermedad. Sin saber en quién confiar, debe navegar por un futuro repleto de peligros y sin la certeza de poder regresar a casa. (FILMAFFINITY)

Tengo cierta fijación con este tipo de producciones, las de futuros post-apocalípticos y crisis climáticas. De hecho, durante muchos años una de mis pelis de confort cuando llegaba el frío era «El día de mañana», que no es precisamente la mejor historia de ciencia-ficción, pero es que eso no es lo que busco. No soy una crítica intelectual de las que hacen reseñas en rotten tomatoes, yo solo busco una historia entretenida con un puntito de realidad y este tipo de cine suele cumplir lo que busco. Pero «2067»... pues no.

Yo te juro que conforme pasaban los minutos e iba sucediendo toda la trama, iba entrando más y más en un estado entre la indignación y la mofa, porque de verdad que llegó un momento en que no podía tomármela en serio.

Tal y como dice la sinopsis, el cambio climático provocó que se extinguiera el oxígeno en la Tierra. Las primeras tomas de la película te dan a entender que eso sucedió en cuestión de días, lo cual ya es inverosímil pero bueno, vuelvo a «El día de mañana», donde ocurre una glaciación también en días, así que por ahí nada que objetar: ya sabía a lo que venía.

Nuestro protagonista, Ethan Whyte, trabaja en algo de mantenimiento junto a su amigo de toda la vida Jude, está casado y se hincha a coger horas extras para pagarse el oxígeno artificial, hasta ahí bien. Un buen día van a buscarle unos policías y se lo llevan a él y a Jude medio detenidos a la sede de la empresa que monopoliza la venta de oxígeno.

Allí conocen a Regina, la presidenta de esa compañía, y le explica a Ethan que lo necesita a él y solo a él para, básicamente, salvar el mundo. Recordemos que Ethan trabaja en algo de mantenimiento, básicamente es un don nadie, pero su padre era científico y a estas alturas de la película sabemos que hizo algo malo, nada más.

Pues bien, Regina los lleva a una sala donde tienen una máquina enorme y lo primero que vemos es que acaban de terminar con éxito un experimento: el de hacer viajar en el tiempo un reloj. El reloj en cuestión, tras regresar con una diferencia de tres minutos, está oxidado por todas partes, quédate con este dato. Allí en esa sala, les explica que la vida en el planeta ya no es sostenible y que llevan años trabajando en esa máquina del tiempo con la que pretenden enviar a una persona 400 años en el futuro para que regrese con una cura para el planeta. Obviamente todo parece un sinsentido, porque ¿de dónde narices se sacan que dentro de 400 años habrá gente en el planeta y habrán podido recuperar el oxígeno? Esta misma pregunta se la hace el protagonista (mientras su amigo está ahí al lado en calidad de florero), y por toda respuesta obtenemos un mensaje que se envió desde ese mismo futuro y que solo dice «mandad a Ethan Whyte».

Hasta aquí, bueno. Tenemos un problema planteado y una posible solución, y damos por hecho que no nos lo van a dar todo mascadito desde el principio, por lo que intriga el saber qué narices pinta ahí Ethan, quién ha mandado ese mensaje desde el futuro y cómo va a salvar el planeta esa supuesta cura. Lo único que no me trago en absoluto es que la empresa que monopoliza el oxígeno artificial, un bien necesario para la vida y por el que la gente debe pagar sí o sí, sea la misma que quiere hacer algo para recuperar el oxígeno natural. ¿Capitalismo salvaje, le suena a alguien? Ya pagamos, y mucho, por el agua corriente, los alimentos de primera necesidad y la vivienda, si de repente se nos estuviera acabando el oxígeno y solo una empresa en todo el mundo se enriqueciera a base de vendérnoslo, ya te digo yo a ti que no solo no iba a investigar para recuperarlo, sino que iba a trabajar activamente para que se acabara ya del todo.

Ethan ya preparado en la máquina del tiempo. Lleva un traje espacial con casco y unas aspas a la espalda. Al fondo, unas luces de colores provenientes de la máquina.

Ethan está muy reticente con eso. Obviamente, aunque haya visto su nombre en ese mensaje, no sabe qué pinta él en todo ese asunto y se niega en rotundo a apuntarse a una misión de la que no sabe si va a volver. Su principal preocupación es Xanthe, su mujer, ya que está enferma, porque ¿para qué van a escribir un personaje femenino que no dependa por completo del protagonista masculino? Vamos, por favor. Es más, aparecen tres mujeres en esta historia: Xanthe, dependiente de su marido; Selene, madre ya fallecida de Ethan cuyo trasfondo es... ser su madre; y Regina, LA MALA. Y ojito a la frase de Jude cuando dice que no se quiere casar para no tener otra boca más que alimentar. 

Entre Xanthe y Jude lo convencen. He de decir que Jude lo consigue de forma muy contundente y cabreándose mucho con su amigo, quédate también con este dato. Así que finalmente el chaval accede y se va a la empresa con el amigo.

Una vez allí, de vuelta a la sala donde está la máquina del tiempo, un científico empieza a explicarle cómo es todo el procedimiento. Primero, necesita un traje especial. Recordemos lo que pasó con el reloj que solo había viajado tres minutos: el traje evitará que a Ethan le pase lo mismo. Además de eso, también va a ejercer de protección porque la máquina es una especie de tirachinas: para no materializar nada dentro de una montaña o en el agua, básicamente se lanza al aire y ya caerá. Lo de equipar el traje con un paracaídas ya tal, mejor hacen que el que va dentro se pegue el leñazo de su vida, que no pasa nada porque le traje lo protege. Ah, y solo hay un traje completamente equipado; tienen otro, pero ese no está listo para viajar. En segundo lugar, comenta el científico que no pueden hacer pruebas porque se requiere una gran cantidad de energía. Lo del reloj ya consumió la electricidad de todo el edificio: enviar a Ethan va a consumir la de toda la ciudad. Le dan un dispositivo tipo Alexa y para allá que va.

En efecto, el planeta está recuperado en el futuro. Tan, tan recuperado que en 400 años han crecido árboles milenarios, muy efectivo eso de que se extinga la humanidad. Lo primero que hace es encender su Alexa (tiene otro nombre que ya no recuerdo, yo rebautizo Alexa al aparatito) y le pide ubicación. Obviamente no tiene conexión con los satélites: si se ha extinguido la humanidad, ¿me dices por favor quién hay encargándose de que la señal llegue de los servidores a los dispositivos? Un detalle que los preparadísimos científicos que crearon la máquina del tiempo no tuvieron en cuenta. Genios.

Pero bueno, Ethan no tarda en encontrar el primer vestigio del pasado: un búnker cerrado con un esqueleto tirado junto a la puerta. El esqueleto... es el suyo, y tiene un agujero de bala en el cráneo. Yo aquí ya torcí el gesto: ¿no ha viajado al futuro? ¿Hay más Ethans? ¿Se hicieron un lío con las líneas temporales? No sé, no me convenció del todo este tema.

Después de ver su propio cadáver, se queda por ahí deambulando sin saber qué hacer y, llegada la noche, se intoxica con una baya venenosa, porque Alexa tampoco lleva equipada ninguna base de datos de especies vegetales del futuro, así que tras escanear las bayas y no tener información de ninguna clase, decide comérselas, ¿qué podría salir mal? Lo que sucede a continuación te sorprenderá: Aparece Jude y le salva la vida con una inyección de no recuerdo qué.

O sea: se necesita una cantidad ingente de energía para mandar una persona al futuro, tanta que acaba con la electricidad de toda la ciudad, pero han podido mandar a Jude solo unas horas después que Ethan con el segundo traje, ese que todavía no estaba terminado pero ahora de repente sí. No solo eso, sino que de algún modo reciben las constantes vitales de Ethan cuando ya solo recibir el mensaje donde se pedía que lo enviaran al futuro supuso muchos años de trabajo e investigación. Y además han sabido exactamente qué le ha pasado y cómo Jude puede salvarle la vida, por lo tanto lo envían allí con la jeringuilla de lo que necesita. Solo vieron que se le paraba el corazón, podría haber sido cualquier cosa: que se cayera por un acantilado, que le atacara un animal salvaje (spoiler: ni un solo animal aparece en esta película, ni en el futuro en el que todo es básicamente una jungla) o que le diera un jamacuco porque sí, pero mira, supieron que se había envenenado con unas bayas. O sea, ¿qué? Ah, y por cierto: Jude lleva una pistola. ¿Por qué? Ya lo sabremos.

Ethan y Jude en el futuro, ambos vestidos con un mono marrón y en lo que se ve que es una habitación invadida por vegetación salvaje y algunas pintadas antiguas en la pared.

Bueno, ahora que están los dos bros (no lo digo yo, lo dicen ellos) en el futuro, en teoría deberían ponerse a trabajar en la misión de encontrar la fuente del mensaje que recibieron, la supuesta cura para el planeta y regresar con la misma. ¿Recuerdas cuánto y con cuánta contundencia insistió Jude a Ehtan con que aceptara? Bueno, pues desde el minuto cero tras su llegada al futuro quiere que vuelva sin más. No solo eso, sino que se pone realmente violento con Ethan: gritos, empujones, amenazas e incluso alguna que otra leche, todo mientras repite frases como que es por su bien o «yo tengo el control». ¿El control de qué? Hay unas tomas en las que claramente Jude parece que pierde el control de sí mismo, que tiene algún problema mental o algo así, pero nada, nunca se sabe el por qué de esa frase que repite en varias ocasiones. 

No recuerdo si es en este momento o antes, pero bueno, a estas alturas de la peli ya sabemos un poco más el por qué de que hayan elegido precisamente a Ethan. Su padre, que ya murió, era el científico jefe en el proyecto de la máquina del tiempo. Por entonces, Ethan solo era un niño, pero por algún motivo que no recuerdo o no te explican bien, su padre configura la máquina para que solo encienda con su ADN. Siendo Ethan un niño, y justo antes de su muerte, le regala un brazalete que lleva clavado. Pedazo de regalo para un crío, ¿eh? Desde entonces lo ha llevado porque no se lo puede quitar. Se ve que aunque ha crecido, la muñeca se ha mantenido del mismo tamaño... en fin. El caso es que, otra absurdez del guion, si la máquina solo va a funcionar con su ADN ¿cómo, en primer lugar, está funcionando antes de que Ethan llegue allí? Más tarde averiguamos que es así como puede iniciarla en el futuro, pero sigue sin tener sentido alguno, o bien todo esto se quedó sin explicar en condiciones. Bueno, también existe la posibilidad de que yo no me enterara porque en este punto estaba pausando cada dos por tres para mandarle audios indignados a Sergio de lo mala que me estaba pareciendo.

Toda la parte del futuro, lo cierto es que es un galimatías tremendo. Ethan consigue arrancar la máquina gracias a su brazalete y, cómo no, hay un fallo eléctrico que les impide continuar. Para solucionarlo, tienen que caminar muchos kilómetros para ir hasta el núcleo de energía (no me preguntes por qué está a tomar por saco y no allí mismo) y, si no lo consiguen en cuatro horas, no solo se va a destruir sino que va a pegar un petardazo nuclear y se va a cargar Australia entera o algo así. En esta parte están los dos amigos enfadadísimos, Jude dando por saco con que tienen que volver a su tiempo e Ethan intentando enterarse de la misa la mitad, muchos lloros, muchos gritos y tú sin saber muy bien qué está pasando.

Fotograma de la película. Los dos protagonistas, vestidos con un mono marrón sucio, van por mitad de un bosque.

Emprenden el camino. Recordemos que casi no les va a dar tiempo, pero aun así Ethan decide desviarse porque patata. ¿Para qué? Para comprobar qué pasó con su mujer. Han pasado 400 años, la ciudad está completamente destruida pero él es capaz de encontrar la escuela donde Xanthe trabajaba y, tachán, ver su cadáver. Viene aquí un momento dramático de la leche, porque eso sí, drama gratis hay en esta peli para dar y regalar. Que yo vi una crítica que decía que los personajes lloran en exceso y pensé «ya está el típico señoro con que los hombres no lloran, a mí dadme dramita»... y le tuve que dar la razón. O sea, Ethan es un llorica. Se entiende a la perfección que la situación le sobrepase: él es un simple currante y lo más arriesgado que hace en la vida es colocarse con chutes de oxígeno puro, y de repente se mete en este berenjenal. Pero es que un porcentaje demasiado alto de la peli es de Ethan llorando y sin aportar nada en absoluto ni avanzar con la trama.

A partir de este punto, estoy retomando la entrada tras un par de semanas, así que ya se me han olvidado cosas, pero siento decirte que no pienso volver a verla para poder traer una sinopsis en condiciones.

Me había quedado en la escena en la que encuentra el cadáver de Xanthe. Básicamente sabe que es ella porque, justo antes de emprender este viaje, le talla una flor en metal y la graba con un mensaje, y el esqueleto tiene esa flor en la mano. La situación, a mi entender, es de lo más aleatorio: el cadáver está en la escuela donde trabajaba Xanthe, no hay más esqueletos que el suyo y además tiene esa flor en la mano. Lo lógico habría sido que hubiera muerto en su casa, porque recordemos que no hubo un desastre de los que te pillan en cualquier situación, sino que el oxígeno se estaba acabando poco a poco. Y la flor, ¿es que la llevaba siempre? No es pequeña, tendrá el tamaño de una palma, es incómoda de llevar, pero ahí la tiene. Yo qué sé, muy fabricado todo para arrancarte la lagrimita.

Después de esto, más peleas entre Ethan y Jude porque Ethan vuelve una y otra vez al mismo argumento de que tienen que volver al pasado. Ethan consigue al fin llegar al generador nuclear ese y entre los dos arreglan el desaguisado. Que, ojo, en un sitio bajo tierra, completamente cerrado, había un cable que se había partido y estaba echando chispas, esa era la avería. Todo el mundo sabe que los cables de 5 centímetros de grosor tienden a desgarrarse solos. Y me hizo mucha gracia la escena de esta reparación, porque aquí nos meten el típico tropo de que para arreglar algo uno de los dos debe quedarse en una sala aislada que va a llenarse de radiación y por tanto va a morir de inmediato. Así que ooootra pelea de los bros porque ambos quieren sacrificarse, obvio. Al final es Ethan el que se queda aislado y ya a punto de morir, más drama y al final... Pues al final se salva, ya está, no me preguntes por qué, ni me acuerdo. ¿He dicho ya que el drama de esta película es completamente gratuito?

Arreglado ya el asunto, vuelven al lugar donde está la máquina del tiempo y ya, al fin, obtenemos casi todas las respuestas que nos faltaban. Resulta que el padre de Ethan y Regina tenían muchas diferencias con respecto al uso de la máquina. Regina opinaba que ya no había nada que hacer y que la máquina debía utilizarse para enviar a un grupo selecto de personas a que repoblaran el planeta cuando de nuevo fuera habitable, mientras que el padre de Ethan insiste en intentar salvar a los millones que dejarían morir en el presente. Al final, hace la jugarreta del ADN, que no tiene sentido ninguno porque recordemos que es para que se active desde el futuro, que desde el presente se puede activar perfectamente, entonces Regina debería salirse con la suya y, de hecho, acaba pegándole un tiro. Todo esto se sabe porque hay una grabación holográfica que está almacenada ahí en el futuro, una cosa loquísima y sin ningún tipo de justificación.

¿Y qué pasa con el esqueleto de sí mismo que Ethan encontró al llegar al futuro? Pues que, al activar la máquina con su brazalete, se abre una puerta que hasta el momento ha permanecido cerrada y oh, sorpresa, es la puerta del búnker con su esqueleto ahí. Nadie lo habría adivinado. Entonces Ethan comprende que van a volver al pasado y que nada más hacerlo, Jude le va a pegar un tiro. Lo sabe no porque sea el más listo de la clase, sino porque combina su Alexa y la del esqueleto y consigue reproducir una grabación en la que ve suceder todo esto. Y entonces descubrimos que Jude es, en realidad, un gamberro que Regina tenía contratado para hacerle el trabajo sucio. Que cuando mató al padre de Ethan, la máquina del tiempo transmitió aquel mensaje de «enviad a Ethan Whyte» y entonces Regina le encomendó la misión de ser su amigo para tenerlo controlado todo el tiempo que necesitaran para echar a andar el proyecto y, llegado el momento, cargárselo. Para que Ethan pudiera activar la máquina que ya pueden activar perfectamente desde el pasado y así transportar a la gente que va a repoblar el planeta en el futuro. Coherente. Hay más dramas, más gritos, más lloros y bueno, al final tenemos giro de guion y Jude se pega un tiro delante de Ethan.

Mientras, en el pasado, Regina ya está contentísima porque sus planes van a salir bien y ya tiene a un montón de gente puesta en cola y les está dando las indicaciones pertinentes. ¿Te acuerdas del reloj oxidado por viajar tres minutos? ¿De los trajes de protección que habían desarrollado tras muchos años de trabajo y uno ni siquiera estaba completo? ¿De que para hacer viajar a una sola persona se consumía la electricidad de toda la ciudad? Pues de repente ya nos olvidamos de todo esto y el montón de gente, hombres, mujeres, niños y niñas, van a viajar en fila india sin traje ni nada. Ahí, alegremente.

Y al fin llegamos al desenlace. El final es de traca, ya verás: con Jude muerto, Ethan decide acabar de una vez por todas con el plan malvado de Regina. Su padre le dijo de pequeño que había que tener fe en las personas, y él la tiene. Está seguro de que puede enviarles algo con lo que trabajar para curar al planeta y, además, destruir la máquina para que Regina ya no tenga oportunidad de salirse con la suya. Pero para ello necesita, y esto es primordial, estar allí... O sea, haber llegado al futuro. Y por eso envía un mensaje al pasado diciendo que le envíen a él. Exacto: el mensaje de «enviad a Ethan Wythe» lo envió él mismo, típica paradoja sinsentido porque crea un bucle absurdo. Y es que, si la condición para que Ethan viajara al futuro era que el propio Ethan, desde el futuro, pidiera que lo mandaran al futuro... ¿? No sé, yo ya me he liado.

Solo queda enviar lo que salvará al planeta y destruir la máquina. ¿Cómo? Pues Ethan se marca un 2x1 aquí porque la solución, el milagro que va a recuperar el oxígeno casi extinto del planeta Tierra, es meter un montón de árboles, hojas y plantas en general dentro de la máquina. Es como del tamaño de mi salón, y vivo en un piso de 50m, así que vamos a echarle no más de 15 metros cuadrados de plantas arrancadas, porque además tiene un margen de minutos para llenar la máquina y solo dispone de una excavadora que, milagrosamente, funciona tras 400 años. 15 metros cuadrados de hojas van a lograr restaurar el oxígeno en un planeta prácticamente muerto. Claro que sí.

Y hasta aquí. Regina se enfada un montón, Xanthe recibe la visita de dos personas que le notifican lo que ha pasado y llora mucho al entender que Ethan no puede volver y terminamos con una última escena en la que Ethan regresa a la ciudad destruida donde encontró el esqueleto de su mujer, y en su lugar encuentra una ciudad desarrollada y moderna, en armonía con toda la naturaleza recuperada.

En resumen, mi opinión es que menudo pestiño de película. He visto algunos titulares que hablan de ella como si fuera guay, la ponen de interesante, entretenida, blablá. Mira, no. ¿Sabes esa chica de TikTok que hace resúmenes de pelis de mierda para que no tengas que verlas? Pues esta sería perfecta para su canal, con eso te lo digo todo. Pero eh, lo dicho al principio de la entrada: si a ti te gustó, me alegro muchísimo porque lo importante es que no sentiste que habías perdido dos horas de tu vida, y tu criterio no es ni mejor ni peor que el mío, así que tranqui.

Si has leído hasta aquí, te agradeceré un montonazo que me recomiendes alguna peli de este palo que sí esté chula, ya sabes, para quitarme la espinita. ¡Nos leemos!

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